Cuando se da inicio a una relación laboral o contrato de trabajo, el patrón y el colaborador acuerdan las condiciones de trabajo y las consecuencias que produce el incumplimiento por alguno de ellos.
De ahí que la LFT regule las causales por las que se puede dar por terminada la relación laboral y sea considerado como un despido justificado.
La Ley Federal del Trabajo prevé la existencia de un Reglamento Interior de Trabajo, en el cual se establecen las disposiciones obligatorias para los trabajadores y para el patrón de la empresa o establecimiento.
Para que un Reglamento pueda surtir efectos legales deberá ser presentado ante el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral.
De acuerdo a lo que establece el artículo 47, las principales causas de rescisión de la relación de trabajo, sin responsabilidad para el patrón son:
- Faltar más de 3 veces en un periodo de 30 días sin justificar o sin el consentimiento de un superior, podría ocasionar baja definitiva.
- Cometer actos inmorales; cualquier situación de acoso, hostigamiento, abuso de poder o actos de vandalismo.
- Incumplir la política de confidencialidad de la organización al dar a conocer asuntos de carácter reservado, con perjuicio a la empresa.
- Presentarse en estado alcohólico o bajo sustancias de narcóticos o drogas irritantes.
- Entregar certificados o referencias falsas que atribuyen al colaborador aptitudes que no posee.
- Poner en riesgo la seguridad del establecimiento o de las personas que se encuentran en el mismo.
- Incumplir el protocolo de seguridad o desafiar las normas preventivas para accidentes o enfermedades.
- Cometer un acto de violencia contra un compañero o familiares de los mismos (aún estando fuera de la jornada laboral) .
- Dañar el equipo de trabajo de manera directa o grave.
- Estar en un proceso penal y, por consecuencia, no cumplir al cien con las actividades laborales.
Es conveniente que leas bien tu reglamento interno y la Ley Federal del Trabajo; de tal manera que conozcas las causales que pueden suscitarse en tu empresa para rescindir en cualquier tiempo la relación de trabajo, por causa justificada.